Un color inconfundible y un sabor único: estamos hablando de spritzer, el símbolo del trago largo del aperitivo. Su origen se remonta a la ocupación de Venecia por parte de las tropas alemanas, que empezaron a añadir un chorrito de seltzer al vino blanco. El termino spritzer deriva de la palabra alemana "spritzen", con el significado de “rociar”. Así nació una auténtica bebida que, gracias a su sencillez y delicioso sabor, ¡rápidamente se haría conocida y apreciada en todo el mundo!
Hacerlo en casa es muy sencillo y rápido, y el resultado está garantizado. Pocos ingredientes son suficientes:
- 3 partes de Prosecco
- 2 partes de Campari o Aperol
- Un chorrito de Seltz o agua con gas
- Unos cubitos de hielo
- Una rodaja de naranja para decorar
Pon el hielo y Prosecco en tus vasos, agrega Campari o Aperol y un chorrito de agua mineral. Mezclar bien, añadir los cubitos de hielo y rematar con una rodaja de naranja: en unos sencillos pasos tu aperitivo casero está listo para ser disfrutado.
Y si quieres servirlo en la copa oficial de Aperol elige nuestro clásico, ¡quizás personalizándolo con una decoración o una dedicatoria!